Reseña Lamb of God – ¡Total descarga de adrenalina!
El regreso del conjunto norteamericano no pasó inadvertido en la capital
Fecha: Martes 25 de abril de 2023
Lugar: Teatro Royal Center – Bogotá
Hora: 7:45 p.m.
Calificación: 9.0
Por Martha Liliana Chaves
Fotografías: Flora Music – Andrés Cardenas (Syracusæ) – Juank Díaz (Lamb of God)
La tercera fecha del Bogotá Metal Fest dedicó una noche al groove, y apuntaron alto trayendo a uno de sus máximos exponentes: Lamb of God. Este quinteto norteamericano se arroja sobre veloz thrash, incorporando acordes rítmicos más próximos al hardcore. La mezcla se acompaña de coros pegajosos con un enorme despliegue de energía.
Luego de su presentación en Rock al Parque transcurrieron seis años para que el grupo liderado por el cantante Randy Blythe retornara a esta ciudad. Lo hacían con dos nuevos álbumes publicados durante el periodo de la pandemia, «Lamb of God» (2020) y «Omens» (2022). Más allá el grupo posee varias canciones bastante conocidas para armar un repertorio ganador.
La apertura fue con talento nacional por cuenta del show de Syracusæ, un grupo bogotano dueño de metal directo que viaja entre acordes con mucha rítmica con una pegada en batería contundente. La banda aprovechó en emplear al máximo su media hora en escena y se mostró con alto volumen ante una audiencia que nutría los dos pisos del teatro.
Syracusæ va en ascenso. La espera por su segundo álbum de estudio es clara, si tenemos en cuenta que no editan un trabajo desde su EP llamado «GEA» (2021) y ya un lejano primer disco conocido como «Radix Nebulaæ» (2017). El año pasado abrieron para los titánicos Gojira en el Movistar Arena y esta vez lo lograron para otra bestia, el «Cordero de Dios». No desentonaron.
A las nueve de la noche las luces se apagaron con una extraña introducción; el abrebocas a la embestida del acto principal. El quinteto originario de Richmond, Virginia, es una colección de riffs bastantes distintivos con mucha potencia en bajo y batería. La vocal de Blythe es demencial y él sabe cómo llevar adelante el show con mucha labor física y constante conexión con el público.
Favoritas de la gente como ‘Walk With Me In Hell’ o ‘Now You’ve Got Something to Die For’ se combinaron con temas más recientes como ‘Ditch’ y ‘Omens’, que da nombre a su último disco. Este concierto marcó el debut en nuestro país para el baterista Art Cruz, quién reemplaza al recordado Chris Adler.
Hablando de Adler, su hermano, el guitarrista Willie Adler, tampoco estuvo presente. Al parecer los requerimientos de salud del covid le impidieron subirse a un avión y su lugar fue tomado por Phil Demmel, guitarrista por varios años de Machine Head. Lo hizo muy bien en acople con el otro guitarrista y fundador del grupo, Mark Morton. En el bajo apreciamos a John Campbell.
Canciones como ‘Omerta’ o ‘Set to Fail’ fueron coreadas y pogueadas en todo el centro de la platea. Hubo mucha accción a todo momento. No cabe duda que la gente apoyó en cada verso y se le vio sacudirse con los giros ejecutados por una banda de alta dinámica.
El final fue implacable con ‘Laid to Rest’ y ‘Redneck’. Dos canciones infaltables en sus repertorios y que representan de muy buena manera la línea de estos músicos que van por sus cincuenta años en promedio.
Este concierto vendido como La Noche Groove cumplió su objetivo, entregando un muy buen sonido, puntualidad y participación de un público capaz de valorar a una banda que alza con fuerza la bandera del metal en este milenio.
